El Granito posee un mantenimiento muy sencillo, gracias a sus cualidades, que permiten que puede limpiarse con un simple trapo húmedo para eliminar la suciedad.
Aun así, debemos tener en cuenta una serie de consideraciones, por si se diese la situación. A pesar de su gran resistencia al calor, no es recomendable poner directamente sobre el granito elementos muy calientes, como ollas, sartenes o bandejas recién sacadas del fuego. Porque un cambio drástico de temperatura podría llegar a producir alguna grieta en la superficie.
Del mismo modo es aconsejable el uso de maderas de corte, para así evitar dañar la superficie. Y tener cuidado con elementos como la sal, el vinagre, el limón o vino, ya que son elementos muy ácidos y si permanecen mucho tiempo en su superficie pueden llegar a dañarla, por lo que es conveniente limpiarlo en cuanto lo detectemos.