Cuarzo Compacto

Las principales características de este material pasan sin lugar a dudas por su dureza, lo que le ofrece una altísima resistencia al rayado. Pero, además, su impermeabilidad de aproximadamente 0,6 y su superficie no porosa hacen que sea resistente a las manchas.

También hay que destacar la protección antibacteriana que la hace mucho más higiénica y salubre. Aunque posee una alta resistencia al calor no lo es a las temperaturas muy altas, por lo que es conveniente tener cuidado.

Otra de sus características es la gran variedad de colores y acabados que ofrece y que hace que se adapte a cualquier diseño.

Gracias a las características que hemos visto antes, este puede que sea el material que menos cuidado y mantenimiento requiera de todos los vistos hasta ahora. Con una limpieza regular con agua y un jabón neutro, aclarando con agua y secando con paño o papel de cocina es más que suficiente para que mantenga sus cualidades durante muchos años.

Pero, aun así, hay algunas recomendaciones que conviene saber para evitar dañarlo de manera inconsciente:

–          No usar lejía ni amoniaco sobre ella, si cae encima limpiarla lo antes posible.

–          No usar hidrofugantes ni selladores para realzar el brillo.

–          No exponerlo a temperaturas muy altas de forma continuada, como una bandeja recién sacada del horno o una olla que acabamos de retirar del fuego

–          Evitar ponerlo en el exterior si está bajo la luz directa del sol o en zonas con lámparas de rayos U.V.

Gracias a su versatilidad el cuarzo compacto puede emplearse en Encimeras, revestimientos, fregaderos, escaleras y pavimentos.